Ladrón de bicicletas
- Vittorio De Sica, 1948
- 14-18 años
- Drama
- Suspense
- 89 min.
- Idioma original: Italiano
- Dirección: Vittorio De Sica
- Año: 1948
- Género: Drama Suspense
- Calificación oficial: Apta para todos los públicos
- País: Italia
- Versiones disponibles: Doblada Castellano V.O. Subtitulada Castellano
- Temas: cine de culto cine social ciudad crisis derechos laborales familia histórico infancia lucha de clases pobreza
-
Premios, nominaciones y festivales:
- Ganadora del Oscar a Mejor Película Extranjera
- Nominada al Oscar a Mejor Guion
- Ganadora del BAFTA a Mejor Película
- Ganadora del Globo de Oro a Mejor Película Extranjera
- Ganadora de seis premios del Sindicato Italiano de Periodistas Cinematográficos
- Ganadora del Premio Especial del Jurado en el Festival de Locarno
Antonio y Maria Ricci, un matrimonio que vive en los suburbios de Roma, trata de sobrevivir en los duros años de posguerra. Un día, a Antonio le asignan un trabajo pegando carteles en la calle. Es su oportunidad de salir de la miseria. El único requisito: tener bicicleta propia. Cuando un ladrón le roba la suya, Antonio y su hijo Bruno se echan a la calle en una búsqueda desesperada de su medio de vida.
En 1952, una de las revistas de cine más prestigiosas del mundo, “Sight & Sound”, preguntó a críticos de toda Europa cuáles consideraban las diez mejores películas de la historia. A pesar de que habían pasado solo cuatro años desde su estreno, Ladrón de bicicletas se impuso a clásicos con más de dos décadas a sus espaldas, tiempo suficiente para que fueran objeto de estudio y alabanzas. La película de Vittorio De Sica quedó por encima de hitos como La quimera del oro (Charles Chaplin, 1925), La pasión de Juana de Arco (Carl Theodor Dreyer, 1927) o La regla del juego (Jean Renoir, 1939). Setenta años después, cuando “Sight & Sound” volvió a realizar su ya habitual encuesta, Ladrón de bicicletas estaba en el número 41 de 250. Más que demostrar que la película es una obra maestra (eso debe decidirlo cada espectador de forma libre e individual), esto viene a indicar que ha sobrevivido al paso del tiempo convirtiéndose en un referente para críticos, cineastas y cinéfilos.
Los casi ochenta años que han pasado desde que se estrenase Ladrón de bicicletas no han hecho ninguna mella en su capacidad de fascinación. Las lecturas que se pueden hacer de la película se van actualizando y transformando con el tiempo, pero la película sigue hablando de cuestiones de hoy en día mediante emociones que aún resultan plenamente reconocibles. La pobreza entendida como la pérdida de dignidad, la inestabilidad personal a la que aboca la precariedad laboral, las relaciones paterno-filiales, las huellas de la guerra en una sociedad, la degradación moral a la que se abandona el individuo cuando se siente ignorado por el sistema, el retrato de la masculinidad tradicional… Todos estos temas y muchos otros más han ido brotando de la película a lo largo de las décadas: cada vez que se vuelve a ella es posible encontrarle una vinculación con el presente.